¿Qué es el duelo?

Se trata de un proceso natural que experimentamos ante la pérdida de un ser querido.  Una experiencia que tarde o temprano todas las personas vamos transitar, donde aparecen una serie de pensamientos, emociones y conductas.

En este proceso participan elementos psicológicos, físicos y sociales, que se manifiestan con una intensidad y duración concreta, determinada por la dimensión y significado que la pérdida ha tenido para la persona doliente. 

Al finalizar al proceso de duelo, el doliente acepta la pérdida y el dolor y se adapta a una nueva vida sin su ser querido.

La evolución del duelo puede complicarse si la muerte se ha dado en especiales circunstancias (la persona fallecida es un no nacido, un bebé, niño/a, adolescente, joven, cabeza de familia; por enfermedad repentina, accidente, asesinato, suicidio, imposibilidad de despedida; enfermedad que se alarga en el tiempo…)

En estos casos, el duelo puede hacerse crónico y convertirse en patológico, de modo que puedes sentir un bloqueo o desadaptación, observando cómo las fases del duelo se repiten o interrumpen y no se avanza en el proceso.

Ocurren entonces que, aún transcurridos varios meses o, incluso, desde el primer día, ya se manifiestan ciertos sentimientos. Puede que albergues sentimientos de culpa inconsolable, desesperación, inmenso vacío, no querer salir a la calle ni comer, dependencia a la bebida o medicación, deseos de morir para reunirse con la persona fallecida, hablar continuamente de la persona fallecida… En este punto debemos estar alerta y contar con intervención terapéutica y farmacológica. 

En Asociación Alhelí podemos ayudarte en el proceso del duelo: contarás con el acompañamiento de una Psicóloga y/o trabajadora social, te reunirás semanalmente con personas que están pasando por tu misma situación.

Además, podrás contar con atención psicológica especializada e individualizada. 

Contamos con sede propia, un espacio cálido y especialmente reservado para ti.